Martín Gaztelumendi nació en 1948 en Oiartzun (Gipuzkoa). Durante el período 1972-77 da clases de Formación Profesional en cursos financiados por el Instituto Nacional de Cooperación Educativa en Venezuela.
Afincado en Vitoria-Gasteiz desde 1977, trabaja como profesor en los talleres en la Escuela Agraria de Arkaute desde 1981 hasta 1997.
En esos últimos años dedicados a la enseñanza profesional se empiezan a fraguar las primeras esculturas que van conformando así su peculiar estilo con varios rasgos comunes:
- Suele trabajar siempre en madera (bien con piezas de iroko traída desde África o con piezas de otras maderas que encuentra abandonadas).
- Utiliza el torno y varias herramientas de fabricación propia muchas de ellas realizadas con materiales reciclados.
- La mayoría de sus esculturas tienen una esfera de madera incrustada, lo que constituye uno de los rasgos más identificativos de sus obras.
- Sus esculturas requieren de mucha paciencia para las labores más delicadas y para el lijado y pulido final de las mismas.
Con estos elementos Martín Gaztelumendi es capaz de dar forma a unas preciosas figuras que simbolizan y hacen real la solidaridad más auténtica, pues además se distribuyen bajo la modalidad de «precio libre dialogado», dedicando las aportaciones que recibe a la financiación de proyectos y actividades de desarrollo.
Martín Gaztelumendi ha sido galardonado en tres ocasiones (1996, 1997 y 1999) con el Premio Blas de Arratibel de artesanía, certamen que organiza anualmente la Diputación Foral de Álava.
Para conocer mejor sus obras y poder apreciar su talento y su sensibilidad, se organizan periódicamente talleres, charlas y exposiciones de sus esculturas por toda España.
En la actualidad Martín tiene su taller en Mendiola, un pueblito delicioso en las afueras de Vitoria, donde sigue elaborando nuevas obras y preparando exposiciones y talleres de “Escultura y profundización personal” en distintos lugares de España.
Felicidades Martín por el nuevo nieto. Me alegro mucho por ti y tu familia. Que Dios les bendiga. También me alegro mucho por todo lo que haces y me gustaría hacer lo mismo algún día y siempre estar productivo, tenga la edad que tenga, y poder servir a los demás sin distinción de raza y edad. Gracias Martín por lo que haces por nosotros. Gracias chaval.
Gracias Orlando: «Una mano lava a la otra y las dos lavan la cara» -dicen los cubanos. Somos partes de un Todo.
Se trata de seguir caminando mientras nos regalan vida. Ha sido una suerte coincidir contigo en un trocito del camino.
Y después… quien nos ha cuidado nos seguirá cuidando: ¡es Su responsabilidad!
Zorionak artisaua!
Zure alaba ikusteak poza handia eman dit, baita ere zure biloba ederrak.
Bakarrik zure bizi-laguna falta da.
Zorionak berriro zure lanagatik.
Mikel
Aupa Martin
Hementxe nabil zure horrialde hau bisitatzen… interesgarria benetan…. zorionak
Un fuerte abrazo desde Babahoyo- Ecuador.
Felicitaciones por la profundidad y sensibilidad con que te sabes expresar incluso en los momentos vividos durante el infarto.
Eres genial
Martín querido! Saludos desde mi patria gaucha!
¡Gracias! Con lo que haces me animás a dar de lo que tengo!
Espero conocer algún día tus pagos y aprender un poco de tu arte.
Te mando un abrazo y saludos a tu mujer y familia 🙂
Manuela